Distinguirlo no es tarea fácil porque las imitaciones de cuero cada vez son más reales. El precio tampoco es determinante porque hay varios tipos de cuero cuyo valor varía mucho según su origen o los procesos de curtido. Sin embargo, hoy te presentamos 5 tips para diferenciar el cuero genuino del sintético.
1. Confía en tus sentidos.
El tacto y olfato son tus primeros aliados para reconocer el cuero real del sintético. El primero tiende a ser más cálido y suave al tacto, mientras que el sintético se siente más rígido, frío y tiene un olor similar al del plástico y químicos.
2. Perfectamente imperfecto
Puede parecerte más atractivo un artículo de color y textura uniforme. Sin embargo, el cuero natural siempre tendrá ligeras imperfecciones, pliegues o arrugas. Esas son buenas señales y hacen que cada pieza sea única.
3. La prueba de fuego.
Enciende un mechero y acércalo al cuero durante 10 segundos. Si es cuero genuino se arrugará, cambiará de color ligeramente y desprenderá un olor parecido al de pelo quemado. Pero si es un material sintético se va a prender en fuego y olerá a químicos o plástico quemado.
4. Pliegues y arrugas.
Si doblas el cuero genuino cambiará ligeramente de color y al presionarlo se marcarán arrugas, lo que no sucede en un material sintético que tiende a mantener su rigidez y forma original.
5. ¿Impermeabilidad?
El cuero genuino absorbe la humedad mientras que el sintético tiene un efecto impermeable. Sin embargo, esta prueba no es la más eficaz porque hoy en día las curtiembres someten los cueros animales a procesos químicos para lograr ese efecto impermeable que es necesario para ciertos usos.
Existen muchas formas más de reconocer el cuero genuino, algunas pueden necesitar un conocimiento más profundo sobre el tema pero te hemos dejado aquí los tips más comunes y fáciles de seguir. ¿Conoces más? Cuéntanos en los comentarios.
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